Incluso si no estás de acuerdo en que Die Hard sea llamada la mejor película de acción jamás realizada, es difícil argumentan que no es el más influyente. Una vez que John McClane de Bruce Willis irrumpió en escena, todo el género se alejó de los musculosos lunks de la década de 1980 para presentar a hombres comunes y unidos.
Además de esto, los conceptos elevados han seguido creciendo, con Die Hard engendrando una gran cantidad de imitadores apenas velados que han tomado la premisa básica de un tipo común atrapado en un espacio confinado contra una suerte abrumadora y trasplantado él en una abundancia de nuevas historias.